Características.

La pintura se caracterizó por los tonos planos (sin sombreado o matices) y los colores brillantes. En las obras, se recurría a la yuxtaposición de imágenes (acción de poner una cosa junto a otra o inmediata a ella) y sonidos, al montaje y al collage (técnica artística que consiste en ensamblar elementos diversos) de elementos de la vida cotidiana  que eran sacados de contexto y recombinados con un criterio irónico o paródico.

También organizaban representaciones improvisadas llamadas happenings (eventos, sucesos). Estos se llevaban a cabo en lugares cerrados o abiertos, como calles o plazas, con escenas fragmentarias, no relacionadas entre sí, sin guion previo ni duración prevista. Podían ser montajes multimedia, con música y proyecciones de diapositivas. Se buscaba que los espectadores participaran modificando su papel pasivo. Muchas veces, el happening se prodrucía sorpresivamente en un lugar público con el fin de alterar, deliberadamente, la cotidianidad.